Alma a alma
|

En esta meditación guiada por el valle del Baztán, vamos a trabajar la capacidad de perdonar y de ser perdonados. Visualizaremos un hilo dorado que sale de nuestro corazón y está unido a otros corazones e incluso un solo hilo unido a nuestro propio corazón.

Al observar estos cordones somos conscientes que algunos tienen nudos, que no son otra cosa que ofensas, expectativas o situaciones que nos han causado dolor. En este paseo por nuestro inconsciente, intentaremos deshacer estos nudos para poder vivir en paz y armonía. Recuerda, que el primero en pedir perdón es el más valiente, el primero en perdonar es el más fuerte y el primero en olvidar es el más feliz.